Un insólito caso se dio en Inglaterra cuando un cisne se paró en frente de las vías del tren y se quedó allí por 40 minutos, provocando el atraso de todos los pasajeros.
Los empleados aseguran que el animal estaba atascado y que no podían liberarlo, por lo que la demora fue inevitable. “Alguien debe haberlo visto y consiguió avisar de alguna manera al maquinista del tren quien logró frenar la máquina, que venía a 160 km/h”, cuenta Jim Wade, un pasajero que fotografió el incidente, según publica The Sun.
Luego de liberar el ave, fue devuelto a la zona que se supone era su hogar, en el lago Neme, que queda cerca de la estación en la que fue protagonista.
John Gelson, el vocero de la compañía de Trenes de la Costa Este, dijo que para el alivio de todos “la buena noticia es que el cisne no salió herido en ninguna manera”

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