Y es que estos japoneses ya no saben qué inventar. Por eso han decidido hacer una cámara de las de carrete de 35mm de toda la vida con forma de carrete, valga la redundancia.
En su interior lleva un carrete de 35mm sobre el que se toman las fotografías, por lo que se deduce que el exterior es tan sólo una carcasa que imita la forma. De hecho, las dimensiones externas de la cámara son 14,1cm x 6,5cm × 6,5cm.
Incorporan un pequeño flash y su funcionamiento se detalla en la página oficial, donde la podrás adquirir por 15 euros, aunque de momento sólo se vende en Corea.
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