Los excéntricos tanques rusos

19:51 / Publicado por Spider Pig /

El tanque volador
Durante la Segunda Guerra el comando motorizado ruso se se preguntaba cómo iban a hacer para cruzar las fortificaciones alemanas y así poder flanquearlos con tanques sin perder muchos hombres y maquinarias en el proceso. Una de las sugerencias sería tan extraña como llamativa: un tanque volador. Su diseño comenzó a finales de 1941 y fue concretado en 1942 dotando a un tanque T60 con el fuselaje de un avión Antonov. A finales del 42 se realizó el primer vuelo. Para despegar el aparato debía ser ayudado por un TB-3 y, tras batallar un poco con los controles, lograba estabilizarse. Si bien resultó funcionar bajo parámetros aceptables, su costo y disponibilidad hicieron que rápidamente se cancele el proyecto. Decidiendo perder muchos hombres y maquinarias.



El gigantesco tanque triciclo
Digno de aparecer en Wild Wild West el Tanque del Tsar o Netopyr, fue un vehículo de combate que durante los años 14 y 15 del siglo XX formó, a nivel prototipo, parte de las fuerzas motorizadas rusas. Llamativo no sólo por su tamaño y la época en la que fue construido -recordemos que el tanque más avanzado de esa época era un rectángulo con agujeros para disparar- sino porque también asemejaba la forma de una carreta gigante. Esto, en efecto, era a causa de su diseño de triciclo, el cual gracias a sus ruedas de un diámetro de 9 metros, permitía ubicar una cabina en lo alto capaz de disparar al enemigo y, en teoría, cruzar trincheras sin ningún problema.

La tecnología de la época probó ser de poca ayuda, y el tanque traía más problemas que soluciones. Especialmente con sus enormes ruedas que solían trabarse y perdían tracción en territorio blando. No es de extrañar que el proyecto fuese cancelado rápidamente.